Un policía novato se sube al coche patrulla, emocionado por su primer día. Su compañero más veterano le dice: «Recuerda, nuestra misión es proteger y servir». El novato asiente y pregunta: «¿Sirves tú el café o yo?». El veterano sonríe y responde: «Lo más importante es que no lo derrames, estamos en código crucial: café en mano».