En una reunión de amigos, uno dice: «Ayer fui al médico y me dijo que tengo déficit de atención». Otro amigo le responde: «¿Y te dio tratamiento?» El primero se queda pensando y dice: «¡No lo sé, me distraje mirando una mosca!» Todos ríen y el tercero agrega: «¡Amigo, con esos reflejos, serás el campeón de mirar al vacío!»