¿Por qué a los romanos no les gustaba hablar del Imperio Bizantino? Porque les resultaba demasiado Constantinoble recordar los viejos tiempos, y siempre se perdían en la discusión cuando llegaban a Estambul.
¿Por qué a los romanos no les gustaba hablar del Imperio Bizantino? Porque les resultaba demasiado Constantinoble recordar los viejos tiempos, y siempre se perdían en la discusión cuando llegaban a Estambul.