Calvo, Brillante y Económico

0

En una cena familiar, el pequeño Miguelito pregunta: «Papá, ¿por qué eres tan calvo?». El papá sonríe y responde: «Es para que tu mamá y tú no se pierdan al ir de compras. Siempre podéis buscar el brillo de mi cabeza en el estacionamiento». La mamá suelta una carcajada y dice: «Y también economizamos en champú, que con lo que comes ya es un alivio».