¿Por qué la ensalada nunca se gana el premio al mejor plato? Porque cada vez que le preguntan algo, se queda lechugando y solo dice: «¡Zanahorita te respondo!». Y claro, así no hay quién se lo tome en serio.
¿Por qué la ensalada nunca se gana el premio al mejor plato? Porque cada vez que le preguntan algo, se queda lechugando y solo dice: «¡Zanahorita te respondo!». Y claro, así no hay quién se lo tome en serio.