¿Por qué los gatos negros ya no cruzan las calles tan confiados? Porque después de tanta mala fama, se inscribieron en una clase de teatro para aprender a cruzar como peatones comunes… ¡sin despertar supersticiones!
¿Por qué los gatos negros ya no cruzan las calles tan confiados? Porque después de tanta mala fama, se inscribieron en una clase de teatro para aprender a cruzar como peatones comunes… ¡sin despertar supersticiones!