Dos amigos están hablando:
—Oye, ¿quieres que te cuente mi vino favorito?
—¡Claro, cuéntame!
—Pues resulta que me estaba tomando uno buenísimo cuando me acordé de ti.
—¿Por qué?
—Porque también era reserva… ¡y nunca vino!
Dos amigos están hablando:
—Oye, ¿quieres que te cuente mi vino favorito?
—¡Claro, cuéntame!
—Pues resulta que me estaba tomando uno buenísimo cuando me acordé de ti.
—¿Por qué?
—Porque también era reserva… ¡y nunca vino!