¿Por qué Mario dejó de ir a esas fiestas de videojuegos? Porque cada vez que alguien decía «vamos a brindar», él terminaba gritando «¡Aquí vamos!» y saltaba del sofá, ¡pensando que había encontrado un nuevo nivel!
¿Por qué Mario dejó de ir a esas fiestas de videojuegos? Porque cada vez que alguien decía «vamos a brindar», él terminaba gritando «¡Aquí vamos!» y saltaba del sofá, ¡pensando que había encontrado un nuevo nivel!