¿Por qué los jugadores de baloncesto nunca se llevan bien con los fantasmas? Porque cada vez que intentan hacer un pase espectral, siempre termina siendo un «air ball». Y claro, los fantasmas no paran de reír y decir: «¡Este pase está muerto!»
¿Por qué los jugadores de baloncesto nunca se llevan bien con los fantasmas? Porque cada vez que intentan hacer un pase espectral, siempre termina siendo un «air ball». Y claro, los fantasmas no paran de reír y decir: «¡Este pase está muerto!»