Un médico cirujano le dice a su paciente: «Tengo dos noticias, una buena y una mala. La mala: en la cirugía, dejamos una herramienta dentro de tu abdomen. La buena: ¡ahora tienes un destornillador gratis para las reparaciones caseras!» El paciente pregunta: «¿Y la cuenta?» El médico responde: «¡Ah, eso es otra herramienta con la que tendrás que lidiar tú mismo!»