¿Por qué los jugadores de fútbol nunca usan calzones rojos? Porque siempre tienen miedo de que el árbitro los confunda con una tarjeta roja y los saque del partido. Un día, un jugador decidió probarlos en secreto, y cuando metió un gol, el árbitro lo corrió solo por precaución… ¡pensó que había metido hasta la tarjeta!