«El Auto Rojo y su Crisis de Fama Vehicular»

2

¿Por qué el auto rojo fue a una terapia de grupo para vehículos? Porque ya no podía soportar más la presión de ser el «modelo a seguir». Cada vez que se estacionaba, los otros autos decían: «¡Miren, ahí viene el popular!». Y así, astillas o no, todos querían su llama… ¡digo, fama!