¿Por qué el pirata no podía recordar dónde enterró su tesoro? Porque cada vez que intentaba hacer un mapa, su loro siempre le repetía con el pico: «¡No confíes en la X, capitán! Esa X podría cambiar de lugar mientras duermes. ¡Argh!»
¿Por qué el pirata no podía recordar dónde enterró su tesoro? Porque cada vez que intentaba hacer un mapa, su loro siempre le repetía con el pico: «¡No confíes en la X, capitán! Esa X podría cambiar de lugar mientras duermes. ¡Argh!»