¿Por qué los jugadores de baloncesto nunca pierden la calma en un supermercado? Porque apenas escuchan «¡rebajas!» ya están corriendo a hacer un triple… pero de ofertas. Eso sí, siempre encuentran una canasta llena de cosas que no necesitan.
¿Por qué los jugadores de baloncesto nunca pierden la calma en un supermercado? Porque apenas escuchan «¡rebajas!» ya están corriendo a hacer un triple… pero de ofertas. Eso sí, siempre encuentran una canasta llena de cosas que no necesitan.