Un mago entra a una cafetería y le dice al camarero: «Quiero un café que me sorprenda, pero por arte de magia». El camarero le responde: «¡Perfecto! Aquí tienes un café con leche… ¡porque los negros están agotados!». El mago, con una sonrisa, replica: «Sorprendente, porque ahora acabo de hacer aparecer uno». ¡Y plop! El camarero, asombrado, exclama: «¡A ver si puedes hacerlo con el WiFi gratis!».
