Un programador se pierde en el desierto con su amigo y, tras días sin señal, ve una palmera. Emocionado, exclama: «¡Una palmera! ¡Estamos salvados!». Su amigo, mirando el portátil, responde: «¿Y cómo sabes que da sombra sin leer el código fuente?»
Un programador se pierde en el desierto con su amigo y, tras días sin señal, ve una palmera. Emocionado, exclama: «¡Una palmera! ¡Estamos salvados!». Su amigo, mirando el portátil, responde: «¿Y cómo sabes que da sombra sin leer el código fuente?»